Evolución positiva: La madurez del Ermitaño más el orden, nos da la evolución favorable.
Evolución negativa: La inmadurez del Ermitaño más la maldad, nos acarrea problemas.
Generalmente las personas que poseen el Arcano El Colgado se caracterizan por darse mucho a si mismos, o bien, poseer una particular forma de ver las cosas. Sin embargo esto les causa una contradicción operativa.
Si bien están dispuestos a darse por otros o por una causa, generalmente también esperan la misma reciprocidad de los demás y su ambiente. Generalmente esto les hiere, porque no siempre se cumplen las expectativas.
Por otro lado, la forma de ver las cosas les hace pasar en ocasiones un muy mal rato, porque no siempre se atañen a los convencionalismos. Sin embargo, pueden acomodarse a los protocolos sociales.
La gran labor o meta de ellos es lograr el sacrificio como una forma de amor incondicional, la espera como una forma para concretar sus metas.
Pueden ser buenos compañeros de trabajo para apoyo en nuevos diseños e ideas, aunque necesitan la consideración de los demás para lograr un buen entendimiento.
En forma sana pueden ser excelentes líderes, porque con su ejemplo de sacrificio y auto imposición en post de un ideal logran bastantes proyectos.
Su tarea o desafío es ser capaz de conectarse con el pasado, tener una mirada distinta, presentarse diferente de los demás, ser capaz de someter a crisis el entorno, aunque implique un sacrificio.
Ponerse en el lugar del otro, hacer algo en forma consciente de sus consecuencias.
Las características psicológicas que lo potencian es la independencia de criterio, ser cuestionador, las capacidades místicas, la capacidad de servicio, ser desinteresado.
Las reacciones que lo limitan son ser demasiado emocional, cierta falta de sentido práctico, ataduras, actitudes contradictorias o ambivalencia.
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